El doctor Frederick Frankenstein trata de desvincularse de su legado familiar, ya que su apellido recuerda los experimentos fallidos de su difunto abuelo por resucitar a los muertos. Cuando recibe en herencia el castillo de la familia, decide mudarse a él. Allí encuentra los diarios de su abuelo y trata de seguir sus mismos pasos para devolverle la vida a un cadáver. Pero su ayudante roba de la morgue el cerebro equivocado y acaban por crear una criatura a la que no pueden controlar.
Mel Brooks se inspiró en El doctor Frankenstein, al que rinde homenaje claramente en secuencias como el robo de cerebros, para realizar esta divertida parodia. Atención al cameo de un irreconocible Gene Hackman como ermitaño ciego.